lunes, 9 de agosto de 2010

Dos meses

Hoy se cumplen dos meses de aquel día en que un ciclo de mi vida se cerró; que sea lo que haya durado, marcó mi existencia.
Recuerdo que aquel día lloré tanto, más bien diría que lo necesario. No entendía porque esa persona que yo juraba querer tanto ahora simplemente se marchaba sin dar ninguna explicación. Ese día simplemente decía adiós, y a decir verdad, mi corazón estaba totalmente destrozado, yo no entendía nada; la razón simplemente estaba perdida al igual que mi ilusión.
Hice miles de preguntas al viento y curiosamente nunca fueron respondidas hasta hoy que me doy cuenta que las cosas suceden simplemente por algo; que a veces es muy difícil entender un porqué y más si el dolor está ahí presente y es reciente.
Hoy después de dos meses lo único que me queda es agradecerle a la vida y a Dios por haber desaparecido a esa persona de mi vida (aunque no por completo).
Debo ser sincera y decir que hace aún un mes no entendía por completo todo, pero decidí darle el tiempo necesario a mi vida, a mi llanto, a mis sentimientos y sobre todo a mi corazón para poder entender y comprender todo esto. Qué más da si fue poco o mucho tiempo, sólo sé que fue el necesario, simplemente eso.
Hoy que todo es más claro, que mi vida toma su camino otra vez, que he aprendido algo más en ella, simplemente sé que lo que debo hacer es sonreír de nuevo a la vida, dar gracias por haberme brindado la oportunidad de equivocarme una vez más y sobre todo de haber obtenido una nueva lección.