lunes, 16 de mayo de 2011

Es que es tan solo que te extraño…

Hacía ya un año que no hablábamos, vaya que no manteníamos una conversación en paz…
Comenzamos con un “hola” como debe de ser; ¿no? Luego la conversación fue tomando su propio rumbo, poco a poco.
Yo sinceramente no sabía que decir, de qué tema hablar, cómo continuar una conversación.
Hacía poco más de un año que te había conocido… unos cuantos meses de ya no hablar y me interesaba saber de ti, quería saber de ti. Qué pasaba contigo, con tu vida.
Te noté algo frío, no sé, tal vez sea mi imaginación, pero así te sentí… es que es tan sólo que ahora somos unos completos desconocidos.
La plática siguió, pero no por mucho tiempo y por eso decidí terminarla, ya no sabía que decir porque tú no decías nada, sólo contestabas lo que preguntaba, y perdón, pero yo periodista no soy.
Tenía la intención, te lo juro, tenía la intención de platicar tranquilamente, saber algo de ti y pensar que cuando menos amigos podríamos volver a ser; pero ¡es que tú! Y sé que no soy yo porque yo fui la que habló, la que empezó…
Tal vez si, quizás si fui una tonta al creer que tú dejarías a lado tu ego y no serías tan obvio al ignorarme y fingir que me contestabas por gusto… siendo honesta me molesta tanto tu “me encuentro excelente” porque siento que es un “mírame estoy feliz con ella a mi lado y contigo de ‘lejos’… ”, Pero créeme, si esto es verdad, si no lo haces para que parezca esto, me siento feliz por ti, me agrada y que bien que te vaya ‘excelente’.
¿Te cuento algo? Para mí hay algo que significa mucho, y creo que no hay nada mejor que recibir un “Te quiero mucho” “Te extrañé” o “fue agradable platicar contigo”, claro está… cuando son sinceros… y yo te dije un “te extrañé”; claro, lo hice porque en verdad así lo sentí, en verdad te extrañé; yo sabía que tenía que decírtelo y lamento tanto que te haya valido, que te haya ‘dado igual’, pero cuando menos me quedo con la idea de saber que no callé y dije lo que sentía, y aunque no lo creas y parezca que te odio, que te ignoro y que jamás tuve interés en hablarte quiero decirte que … es tan sólo que te extraño.


Stefany Ibarra.

lunes, 9 de mayo de 2011

Quizás mañana sea ya muy tarde.

Hacia tanto tiempo que había prometido nunca más llorar a esos “viejos amigos”, a esas personas que habían decidido abandonarme en mi viaje, bajar de ese tren. Y me refiero a mi vida como si fuese el viaje y al tren como si ahí estuviesen las personas que me acompañan en ella, que siento yo, gustosamente han decidido tomar este viaje conmigo; y yo comprendo, digo no espero que toda la vida se la pasen en el tren, el tren no es grande ni pequeño, es perfecto. Sinceramente creo que tienen que bajar para que al seguir andando suban más y más.
No pretendo atar esas almas a mi toda la vida, es sólo que como siempre y en todo existe el amor y la costumbre (prefiero sentir amor y no costumbre por las personas, lastima que esto solo se da) entonces gracias a que existe o mucha costumbre o mucho amor si ellos se van es muy probable que venga el dolor… sí, así es. No es malo sentir dolor, sólo que no es agradable.
Hoy me puse un tanto melancólica por una charla que tuve con mi mejor amigo, esta vez a diferencia de otras veces no fue por amor, fue tan sólo que tocamos el tema de mi mejor amigo, en el pasado claro, y en mi mente aparecieron muchas imágenes y recuerdos; tuve ganas de llorar, pero las evité, y no, no fue por la promesa, es que eso ya no tiene caso. ¿Porqué llorar a algo o alguien que ya no está? Y es que me fue imposible pensar que la persona con la que hablaba en ese momento sobre eso se trataba de mi actual mejor amigo, y no pude aguantar esta vez las ganas de llorar, porque pues él aún estaba aquí, siendo mi amigo, alegrando mi vida, dándome ánimos, sabiendo que la vida si tiene sentido y ese sentido lo he encontrado en él.
Claro que siento miedo de perder a mis amigos, pero he aprendido que si vivo con ese miedo… realmente no disfrutaría pensando que todo esto que ahora tengo algún día podría ya no estar más; y es por eso que ahora he cambiado en todo esto, he empezado a darme cuenta que no hay nada mejor que disfrutar y vivir feliz con todo aquello que tengo ahora, porque quizás mañana sea ya muy tarde, y sinceramente no quisiera arrepentirme de algo así.


Stefany Ibarra.